A sus 21 años, Achraf Hakimi dice adiós al Real Madrid. Aunque para el jugador es más un hasta luego, ya que el club blanco es «mi casa, fui criado, mimado y educado».
Tras dos temporadas cedido en el Borussia Dortmund, Achraf se ha convertido en uno de los laterales con mayor proyección de Europa. Los grandes clubes han llamado a su puerta. Y ha acabado aceptando el reto de jugar en la Serie A, defendiendo la camiseta del Inter.
Deja, de manera definitiva, el Real Madrid. Se va del club donde llegó como un niño de apenas 6 años y en el que se ha formado hasta convertirse en profesional. Y ha decidido despedirse a través de una emotiva carta dirigida a la entidad, sus trabajadores y a su afición. Ha sido traspasado por 40 millones fijos más 5 en variables. Aunque el Madrid se reserva un derecho de tanteo.
«Nunca había imaginado que podría llegar este momento. No es una despedida porque de tu casa no te puedes despedir, te puedes alejar. Pero siempre será el hogar donde encontré la felicidad y los valores que me han hecho crecer», señala.
«El Real Madrid es mi casa, fui criado, mimado y educado para que llegara a ser la persona que ahora mismo soy. En el Real Madrid no solo se forman deportistas. Entré por la puerta de Valdebebas con 6 años sin poderme imaginar lo feliz que iba a ser allí dentro», añade.
«Gracias a todos y cada uno de los trabajadores del Club, a los entrenadores y a todos mis compañeros (la mayoría amigos de verdad) que me han acompañado en esta bonita etapa de mi vida.
Por último, agradecer a todos los madridistas que me apoyaron. Y que seguirán apoyando al equipo en todo momento. Ahora seré uno más de ellos.
¡Muchas gracias Real Madrid!
¡HALA MADRID!».
© Fotografías Achraf despedida | @achrafhakimi Instagram